Una gallina perseguía a un ciempiés y el ciempiés estaba
gritando:
-¡Socorro compañero que me está persiguiendo una gallina!
Y el compañero le dice:
-Espera y me pongo los zapatos.
-¡Socorro compañero que me está persiguiendo una gallina!
Y el compañero le dice:
-Espera y me pongo los zapatos.