jueves, 25 de julio de 2013

El Burro Triste Y Alegre

Un hombre llamado Juan tenía un burro muy triste, y no sabía cómo hacerlo reír. Entonces publica un anuncio en el diario que decía: 
"Pago 10. 000 dólares al que haga reír a mi burro, y el que no lo haga reír deberá pagarme una determinada cantidad. " 
Al día siguiente en la casa del hombre: una larga cola de humoristas, payasos famosos que venían hacer reír al burro. Pasa el primero y nada (o sea debió dejar el dinero) pasa el segundo y nada... bueno así uno tras otro hasta que llego un chinito. 
- Juan dice: ¿vos venís hacer reír a mi burro? 
- Chinito: si, yo venir a hacer reír a burrito. 
- Juan: bueno pasa a ver si tienes suerte. 
El chinito entra en la habitación donde se encontraba el burrito. Al rato sale el chinito y el burro que se mataba de la risa y no paraba de dar carcajadas, Juan muy impresionado le dio toda la plata que había juntado, y el chinito se fue. 
A la semana otro anuncio de Juan que decía: 
¡Pago 10. 000 dólares al que calle a mi burro! 
¡Que vuelva a ser el mismo burro triste que era! ¡NO LO SOPORTO! 
Al día siguiente: una larga cola, de personas que venían a contarle al burro de sus desdichas en la vida: tragedias, familiares, fallecidos, etc. a ver si podían hacerlo llorar y que volviera a ser el mismo burro triste de siempre. Entra a la habitación donde se encontraba el burro: el primero: nada. El segundo: nada. Bueno regresa el chinito nuevamente. 
- Juan dice: ¡volviste! 
- Chinito: si, yo venir a poner triste al burro. 
- Juan: ¡Bueno, está bien! 
A los minutos sale el chinito de la habitación con el burro triste y llorando. 
- Juan dice: perdóname pero ¿cómo hiciste para que mi burro se mate de risa y después llore? 
- Chinito: para hacerlo reír, le dije que lo tenía más grande que él y para hacerlo llorar: ¡se lo mostré!