En un avión en vuelo, de
pronto se siente un grito Ayyayyyayyyycito..
A los tres minutos vuelve a repetirse el grito. Un pasajero avisa a la azafata, quien recorre el avión pero no logra descubrir su origen, por lo que se pone en alerta.
Pasan otros minutos y se oye nuevamente el grito. Esta vez, la azafata descubre al hombre que gritó, se acerca rápido y se produce el siguiente diálogo:
- ¿Qué le pasa señor le duele algo?
- No señorita. Responde el sujeto.
- Pero, ¿Es usted enfermo del corazón, esta mareado?
- Tampoco señorita.
- ¿Y porque se queja?..
El sujeto se abre la correa del pantalón y explica atribulado:
- Bueno, es que como está prohibido viajar en los aviones con monitos, yo lo metí aquí ( y le señala el interior del pantalón).
A lo que la azafata señala:
- ¡Pobrecito, el monito debe tener hambre!
El sujeto responde: Que va a tener hambre señorita, si ya se ha tomado tres mamaderas